11 de marzo de 2006

Reflejo

Estás parado frente a mí, mirándome a los ojos... pero ya no sé quién sos. Me recordás a alguien, a otra persona. Alguien que tenía incluso más miedos, alguien que esperaba más cosas de la vida, alguien que creía que cada momento sería infinito, alguien con más ganas de todo, alguien con muchos amigos, alguien con muchas risas, alguien con los ojos chispeantes, alguien con más sueños, alguien que creía en los demás, alguien que se sentía querido, alguien que se sentía valorado, alguien que no tenía muchos golpes, alguien que no se animaba demasiado a romper las reglas, alguien que aún tenía la esperanza de que algunas personas no tienen maldad, alguien que no tenía maldad, alguien sin rencores, alguien sin fantasmas. No, no sos esa persona. Tu apariencia es similar, pero llena de golpes, de heridas, nublado por la decepción, derrumbado por las desilusiones, con menos miedos pero con pocas esperanzas. A veces, incluso, sin ganas de seguir caminando. Con la mirada triste y perdida y el pensamiento arbumado. No lo tomes a mal, pero no me caes bien. Quiero que esa otra persona regrese, si es que encuentra el camino adecuado para hacerlo. Buscala, decile que me siento desprotegido.

Sí, por qué no... llorar un poco puede ser muy sano.

"Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos."


3 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusto lo que escribiste trolita

Anónimo dijo...

hola josho, ehh no maa lo que escribiste, me tocó, sobre todo porque tuve una cruda experiencia similar a tu escrito. :(

Chinchiya dijo...

"Lo que no mata endurece" - Nietzche ;)

O dicho de otra manera: sufrir es la unica manera de crecer.

No creas que todo tiempo pasado fue mejor... te faltan todavía muchos horizontes para descubrir.

La familia Ingalls es mentira, pero nadie murió por descubrirlo (me incluyo, por supuesto)